José María Segovia de Arana ha nos ha dejado, tras una vida tan larga como fecunda. Es difícil describir siquiera sucintamente el impacto de su quehacer en la génesis y desarrollo del Sistema de Salud. Su historia no se entiende sin José María Segovia.
En tiempos de zozobra, incertidumbre y voluntades reformistas hay una certeza aceptada con rara unanimidad: tenemos un excelente SNS que se compara con éxito con cualquiera de los mejores del mundo. A diferencia de de lo que sucede en otros ámbitos no pide grandes reformas “estructurales”.
Este logro no fue un fruto obligado e inevitable del desarrollo económico, político y social. El desarrollo ayudó, pero las cosas podrían haber sido de otra manera y no lo fueron por la audacia, clarividencia y entrega de unos cuantos a los que el Dr. Segovia lideró.
Algunos hitos propiciados por él modelaron y condicionaron el futuro.
En 1964 una pequeña clínica privada (no estrenada) de los dominicos (la Clínica Puerta de Hierro) era vendida a la Seguridad Social que no sabiendo muy bien qué hacer con ella, la encomendó a dos médicos visionarios (J.M.Segovia y D.Figuera) que aceptaron el encargo con algunas condiciones que incluían dedicación plena y exclusiva, estructura jerarquizada y especializada de servicios médicos, libertad para la contratación de personal (ajena a la entonces imperante), ambición investigadora y presencia de unos posgraduados llamados internos y residentes similares a los que existían en algunos hospitales españoles y extranjeros. El sistema (modelo Puerta de Hierro) tuvo éxito inmediato y fue exportado a otros grandes centros que se estaban abriendo.
En los 70 y tras aceptarse (no siempre sin resistencia) que el éxito del cambio radicaba en la formación práctica supervisada y remunerada de los médicos recién graduados se institucionaliza y consolida el sistema MIR y los requerimientos para la formación de especialistas. Todo ello cristaliza en normas propiciadas por J.M.Segovia a finales de esa década siendo el primer presidente del Consejo de Especialidades Médicas y Secretario de Estado para la Sanidad.
Siendo médico de cualificación y perfil hospitalario entendió antes y mejor que muchos que una atención sanitaria integral no era posible sin una potente medicina primaria y se convierte en promotor decidido de la Medicina Familiar y Comunitaria, creando la especialidad (1978) y construyendo el primer centro de salud con acreditación docente.
En otro extremo tecnológico y un año después (1979) promueve y consigue que se apruebe la modélica Ley de extracción y Trasplante de Órganos.
Si ha habido un protagonista con visión estratégica y audacia gestora en el escenario sanitario español del siglo XX ese ha sido sin duda el Profesor José María Segovia de Arana.
Descanse en paz y eterna vida en nuestra memoria agradecida.
En Toledo a 4/01/20169
José Luis Conde Olasagasti (Ex MIR de la Clínica Puerta de Hierro)